Cambio de piel

Mientras el Partido Popular, con el apoyo de la mayoría de españoles se esfuerza por contrarestar la ruinosa herencia del socialismo, representado en España por las siglas P.S.O.E., éste, se limita a colocar toda especie de trabas y problemas con el fin de anular o minimizar el esfuerzo de recuperación que intenta el Partido Popular.

Al mismo tiempo que frena con sus hipócritas adhesiones la salida del pozo en el que éllos nos metieron, ahora se prepara para la próxima confrontación en las urnas dentro de cuatro años, a la que espera acudir con un "partido" completamente renovado, con unas "ideas" novedosas que inclinen la balanza del voto a su favor, pues bien saben éllos la poca fidelidad del voto ciudadano cuando su bolsillo sufre, y como para salir de la crisis sufrirá, el socialismo cuenta con éllo para arrimar el voto a su favor dentro de esos cuatro años.

La ciudadanía olvida pronto, y en 2016 habrá olvidado la terrible situación en la que el PSOE ha dejado España; rota, vacía, desconocida, y que hace tiempo, cuando por primera vez tomaron el poder, ya vaticinó un socialista de postín.. "no la conocerá ni la madre que la parió"; ¿recuerdan?.

Y aquí topamos con el gran problema del Partido Popular. Sanea la economía, pero deja la formación política, ideológica y ciudadana para después, olvidando los valores básicos de la gente que ha preferido sus siglas. Es una lástima que no aprenda la lección, dejándose avasallar una vez tras otra, por esa "izquierda" que le ofrece la mano hipócritamente, mientras planea su derrota y su desaparición del mapa, tanto FÍSICO como POLÍTICO.

El socialismo, o sea el PSOE, actua de forma diametralmente opuesta. En principio, con la desfachatez que dá el sentirse rico de la noche a la mañana al conseguir el poder, utiliza los fondos públicos para domesticar a la ciudadanía inculcando su ideario político, sobre todo a la juventud, la cual cae fácilmente en las doradas bondades del "progresismo" al sentirse respaldada en su innato rechazo hacia lo establecido, no duda en fomentar su ideario en los medios audiovisuales y escritos, subvencionando generosamente a los encargados de producir programas, películas o reportajes, convenientemente estudiados para llegar al fin deseado. De igual forma, se rodea de grupos marginales, a los que la sociedad en principio rechaza por sus excesos contranatura y que no dudan ser afines a la ideología socialista, con más motivo si son generosa y con frecuencia subvencionados. También busca futuros votantes entre el colectivo industrial y campesino, dotando generosamente a los sindicatos, liberados sindicales y correligionarios, con empleos en los que el esfuerzo brilla por su ausencia, pero dotados de una buena renumeración.

Y así podríamos estar describiendo en centenares de folios, las mil y una forma en las que el socialismo se basa para sus actuaciones. Y eso sin meternos a su forma de gobernar, donde los diversos Ministerios se dedican a gastar mucho más de lo que ingresan, sobre todo, en proyectos las más de las veces inútiles, inproductivos y siempre onerosos. Es raro el proyecto que aciertan las manos socialistas; sencillamente ¡DERROCHAN!.

De esta forma, no puede extrañarnos que en el 2016, con las arcas otra vez llenas gracias al esfuerzo de todos, y si Dios no lo remedia, el "Socialismo Renovado", tratará de inculcar en las mentes del pueblo, los sufrimientos y sinsabores sufridos, provocados por la "derecha" al intentar salvar "SUS INTERESES" olvidando el bienestar de la ciudadanía en su conjunto. ¡Y volverán al poder!. ¡ Y volverán a gastar!. ¡Y volverán a hundirnos otra vez!.

Es lo que tiene de característico el PUEBLO ESPAÑOL: QUE NUNCA APRENDE DE SUS ERRORES. Y así llevamos siglos.