Hay
que ver con qué facilidad se manifiestan los socialistas, tanto si
tienen afiliación como si no la tienen; toda la culpa de lo que está
pasando en España la tienen los recortes que alegremente ha impuesto
el gobierno central, o sea, el PP.
Ya
nadie se acuerda, de los ocho años en los que estuvo gobernando el
socialismo, (bueno, lo de gobernar.......) y en los que se repartía
el dinero a base de subvenciones a todo el mundo.
“Estamos manejando dinero público, y el dinero público no es de
nadie.”, decía la ministra Carmen Calvo Poyato, cuando
figuraba en el gobierno del “superestadista” José Luís
Rodríguez Zapatero.
Ahora,
después de haber dejado España con un nivel de paro obrero
insoportable, después de haber llevado al cierre a miles de pequeñas
y medianas empresas, después de haber obligado a millares de jóvenes
a buscarse el sustento en el extranjero, después de haber obligado a
miles de familias a buscar subsistencia en los centros “católicos”
de ayuda a los necesitados, después de tantas y tantas tropelías,
robos descarados, fraudes a la UE con los fondos de ayuda, etc.etc.
vienen ahora, con toda la desfachatez que les caracteriza, a pedirle
cuentas a un gobierno de signo contrario, (el cual no ha llegado
realmente ni a la mitad de su legislatura), y que tratando de
recuperar todo lo perdido en los “dos cuatrienios nefastos”, está
perdiendo la confianza de sus electores al dejar de cumplir las
promesas “morales” que ese electorado esperaba como agua de mayo,
y que figuraban con letras de molde en su programa electoral.
Pero
eso es lo que había planeado el socialismo; dejar en la miseria a
más de media población española, pero dejando sus sueldos y
canongías a buen recaudo, sabiendo que iban a perder las elecciones,
y prepararse para dirigir y liderar junto con los sindicatos, las
movilizaciones apropiadas, ya que sabían que el nuevo ejecutivo no
podría solucionar los problemas creados, sin tener que recortar el
nivel de vida de la ciudadanía.
Ahora
esperan, que el refrán árabe:”Siéntate
a la puerta de tu casa y verás pasar el cadáver de tu enemigo”,
se cumpla, y dentro de unos meses vean pasar,“muerto
políticamente”, al actual Presidente del Gobierno D. Mariano
Rajoy.
Aunque
si llegase a pasar lo anterior me confirmaría que el Sr. Rajoy no
tiene, o le faltan en mucha cantidad, las agallas suficientes para
darle la vuelta a la tortilla, ¿como?, veamos:
1º,
Cerrando el grifo a cualquier subvención, tanto a partidos,
sindicatos, ONGS, etc.
2º,
Acabar con el consejo del reino y el senado, nidos de exconsejeros,
expresidentes, exministros,etc.
3º,
Reformar la Constitución y acabar con el sistema letal autonómico,
refugio de incapaces, aduladores y ególatras, que se creen tocados
con el dedo divino, pero que están llevando a nuestra Nación al
precipicio de la desintegración con sus gastos suntuosos, propios de
«maharajás» indúes, pero NO de servidores de una ¿democracia?.
4º,
Reducir el número de servidores del Estado a un tercio de los
actuales: No puede haber más gente viviendo de la política que la
totalidad de médicos,bomberos y policías juntos.
5º,
Adaptar los sueldos de TODOS los servidores estatales, a un nivel que
sirva de ejemplo a los españoles que viven momentos de inseguridad,
pobreza y desamparo.
6º,
7º, 8º, etc.etc. y muchos más que no vale la pena citar. El
SENTIDO COMÚN debiera ser el guía de todas las decisiones, aun las
más dolorosas. Pero todas empezando por la cabeza.
Solo
con una actuación enérgica, mitad demócrata y mitad dictatorial,
puede salvarse una España que parece sana, pero que por su interior
corre la podredumbre leprosa de la corrupción.